La vida va pasando lejos de donde naciste y te vas acostumbrando a nuevas costumbres, te integras al país que llegaste, vas sintiéndolo poquito a poquito tuyo. Pero nunca dejas de extrañar la isla que dejaste atrás, cuando regresas te mata, no están la mayor parte de tus mejores amigos, andan regados por el mundo en otro sitio como tú. Pero aun quedan algunos, aun queda el azul de su cielo, la belleza de las cornisas y los balcones, ese sol que mata al mediodía, ese malecón inmenso que es capaz de abrazarnos y hacernos sentir pequeñitos ante la inmensidad del mar y la belleza ajada de mi Habana. Y entonces te pones a pensar si alguna vez volverás a sentir que perteneces a un lugar, que eres de alguna parte y te resignas a que nunca serás ni de aquí ni de allá.
Y no es falta de fe es que yo ya no sé lo que hacer
y es que quiero creer
para los que aquí están, dibujando un amanecer
y rezando
por aquellos que escapan al mar al anochecer
y el silencio se va al mar
y otros que llorarán por perderse este atardecer
no es que pueda yo decirte
la solución, que es mejor ni peor
ya que estas aquí ¿que vas a hacer?
dime
el destino es parte de tu voz y tu razón
por un tiempo mejor
Fragmento de la letra de Amanecer del disco Habana Blues
